Este experimento fue realizado por los servicios de salud pública de Estados Unidos, y realizados en Tuskegee (Alabama) de ahí su nombre, entre los años 1932 y 1972.
Los conejillos del experimento eran en su mayoría campesinos analfabetos afroamericanos, quienes fueron engañados para infectar a dichos sujetos de prueba con el virus de la sífilis, diciéndoles que les estaban proporcionando atención médica gratuita pagado por el gobierno.
El experimento tenía como objetivo conocer cuáles eran los efectos sobre el cuerpo cuando la enfermedad no era tratada.
El experimento seguía en marcha incluso después de que se usase la penicilina para tratar la enfermedad y cientos de hombres afroamericanos murieron. Como consecuencia y como resultado muchas de sus esposas e hijos también fueron infectados.
Fueron en los años 60s cuando se comenzó a rumorear estos hechos, pero no fue hasta que el New York Times y el Washington Post quienes reportaron la existencia de tal experimento.
Entonces, en 1972 la prensa filtró el proyecto, y el experimento fue cancelado, dos años después se creó una comisión para regular la experimentación con humanos, y en 1997, el gobiernos de los Estados Unidos pidió públicamente disculpas, pero no se conoce ninguna otra medida para compensar a las víctimas.
Fue considerada como "posiblemente la más infame investigación biomédica de la historia de los Estados Unidos"
Los médicos de dicho experimento fueron:
Todo este jaleo se le atribuye al doctor Taliaferro Clark, cuya intención inicial era observar a los sujetos con sífilis no tratados durante 6 u 8 meses, y, entonces comenzar la fase de tratamiento. Se retiró al año de su comienzo ya que disentía de las prácticas engañosas sugeridas por otros miembros del grupo.
Eugene Dibble, era el jefe del hospital del Instituto Tuskegee.
Oliver C. Wegner, fue director de la clínica de Enfermedades Veréneas en Arkansas, jugó un importante papel en el desarrollo inicial de los protocolos del estudio y continuó asesorando y asistiendo cuando se convirtió en un estudio observacional a largo plazo del no-tratamiento, reclutó a los sujetos mediante engaños.
John R. Heller, condujo el experimento por muchos años, incluso cuando la penicilina era ya un éxito en el tratamiento de la sífilis y cuando se formuló el Código de Nuremberg (1947), donde se recogen todos los derechos de los sujetos sometidos a ensayos clínicos.
Cuando dicho experimento salió a la luz, Heller afirmó para defenderlo:
"La situación de los hombres no justifica el debate ético. Ellos eran sujetos, no pacientes; eran material clínico, no gente enferma"
En los años venideros se han hecho muchas referencias al experimento en numerosas series de TV, en cómics, etc, como en House, Expediente X Half Baked, Verdad.
Y es que tal como dijo Bil Clinton cuando pidió disculpas sobre el caso, no se puede deshacer lo que está hecho ya, no pueden mirar para otro lado, solo pedir disculpas pero en un caso donde hay numerosas víctimas, quizás no les valgan solo las disculpas, en la época que se comenzó hacer el proyecto apenas habían derechos humanos, por no decir, que no habían, fueron recogidos seriamente después de la II Guerra Mundial, después de lo ocurrido en el Holocausto Judío, pero seguramente, sin darnos cuentan no será el único ensayo clínico que experimentan sobre la población hoy en día se comenta mucho sobre el SIDA, como surgió, con pruebas contra la Polio por ejemplo, gripes, incluso se comenta que hay una conspiración para no curar en clase en fin, se dicen muchas cosas, y otras tantas que se hacen también y se escapan de nuestras narices, solo toca esperar que no nos toque, y si ocurre el caso poder responder a tiempo, si es que nos hacen caso, al fin y al cabo somos conejillos de indias del sistema.
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